jueves, 9 de junio de 2011

Guest (2010) de José Luis Guerin

Los rótulos de los días como únicos signos de que se trata de un “diario”. Las palabras de Jonas Mekas y Chantal Ackerman como iconos de una apuesta estética concreta. Y, unas hojas blancas de cuaderno –que casi al final del film aparecen escritas y dibujadas– como símbolo de una(s) historia(s) todavía por concluir. Historias que pueden ser pero que acaban no siendo.

Después de su proyección en los Festivales de Venecia, Toronto o San Sebastián –al que volvió tras obtener el premio especial del jurado por En construcción en el año 2001– y su preestreno en los cines Alexandra de Barcelona en octubre de 2010, Guest de José Luis Guerin se estrenó el 25 de marzo de 2011.

El punto de partida del film es Venecia en el año 2007, durante el Festival de Cine, cuando Guerin fue a presentar En la ciudad de Sylvia (2007) y donde el director, como protección ante la que califica de mirada depredadora de los medios, se “escondió” tras su cámara.

De montaje sugerente, con una técnica pulida y con una música y sonido atractivos, pero con un discurso un tanto artificioso, Guest muestra a un Guerin de viaje, “invitado” a diferentes festivales, en busca de temas o personajes para esta película, pero puede que, sobre todo, para las que vendrán después. De este modo, el film está construido mediante retales que conforman una serie de “signos”, evocadores para Guerin, pero que para quien los lee u observa sólo significan a medias.

Entre las imágenes “encontradas” y filmadas, una de las constantes, respecto a sus obras anteriores, lo constituye la presencia de lo femenino. Mujeres a las que goza observar. El resto, superficies, tejidos, reflejos, sombras y rostros sobre los que se desliza, y en ocasiones se detiene.

Por encima de la narración o del debate sobre la diferencia entre ficción y documental, derribado de un plumazo por las palabras de Chantal Ackerman, Guest pone el acento en la identidad, tanto personal como colectiva; aquello que José María Nunes denominaba verse reflejado en pantalla y cercano también al concepto de Jorge Oteiza sobre el cine que, consideraba, debía ser un hueco donde el espectador habitase mientras durase el film.

Así, el resonar del eco de las palabras “el terrible sentimiento de la indiferencia del mundo. Mi coraje se había agotado”, de Portrait of Jennie (1948), que se escuchan en Guest, retumban a lo largo de todo el film, impregnándolo de un desasosiego, resignado a la vez que alentador, semejante al: “Derrotado. Derrotado pero no vencido” de No compteu amb els dits (1967) de Pere Portabella.

Quim Casas afirma que Guest “podría ser la historia de unas imágenes que buscan convertirse en una película” (Dirigido por, Octubre 2010). Invirtiendo esta fórmula, Guest también podría ser una mirada, la de Guerin, que busca convertir en película las imágenes que va encontrándose por “azar”.

Imágenes que en ocasiones son capturadas por una mirada que lejos de ser inquisitiva se muestra sesgada y que dista de la perspicacia que se le atribuye, apelando generalmente a que su cine es “otro” y su procedencia los márgenes o la periferia. Pero, miradas e imágenes no siempre atienden a las “nobles” etiquetas que las pueden acompañar.

Ainize González




FICHA TÉCNICA


Dirección: José Luis Guerin

Guión: José Luis Guerin

Montaje: José Tito

Fotografía: Gerardo Gormezano, J.L. Guerin

Sonido: Amanda Villavieja, Marisol Nievas, Ricard Casals

Música: Gorka Benítez, Daviol Xirgu, Masatoshi Kamaguchi

Producción: Versus Entertainment y Roxbury Pictures

Distribución: Versus Entertainment

País y año de producción: España, 2010